Carmen Barbieri disfruta día a día de las funciones de Bravísima junto a su marido Santiago Bal y elenco en Mar del Plata. La vedette está tan consustanciada con la obra que la tiene como protagonista que está cerca del escenario cuando no participa de algún cuadro de la revista. Para los que creen que Carmencita espera su turno en el escenario en la comodidad de su camarín, les decimos que se equivocan. La mujer de Santiago Bal se transforma en espectadora de su propia obra en la mismísima platea del teatro. Por supuesto, cómodamente sentada en las últimas filas de la sala para no ser descubierta por el público presente. Lo que se dice una espectadora de lujo.
