Gastón Pauls y Alejandro Suaya fueron socios en la productora de contenidos Rosstoc que el 6 de diciembre pasado entró en quiebra. Numerosas fueron las denuncias de productores y trabajadores de televisión que sufrieron las promesas incumplidas de Suaya y Pauls. Al parecer el modus operandi de la productora consistía en dilatar los plazos de pago engañando a los trabajadores. Tal es así que el atraso en el pago de salarios durante el rodaje de "Todos contra Juan", derivó en medidas de fuerza de los trabajadores. Tanto Pauls como Suaya despidieron trabajadores sin indemnización, ni previo aviso y dejaron un tendal de deudas en sueldos, aguinaldos y aportes previsionales. Durante las grabaciones de "Ciega a citas" y "Todos contra juan 2" los empleados de Canal 7 y Telefe impidieron que se grabaran escenas en los estudios de los canales por no estar debidamente registrados los trabajadores de Rosstoc. Si bien el conflicto llegó al Ministerio de Trabajo no se logró que se efectivizaran pagos a los empleados dado que la productora entró primero en concurso preventivo y luego se decretó su quiebra. No son pocos los que consideran que tanto Pauls como Suaya deben sufrir además de las acciones penales y económicas correspondientes, una dura condena social del público.