Poco se sabe acerca de la intimidad de una de las artistas más importantes que tiene nuestra colonia artística. Carmen Barbieri tiene una creciente debilidad por la tecnología. La figura indiscutida de¨Bravísima¨ cada vez que viaja al exterior en los parates que tiene su obra, compra productos de última generación. La gran adquisición 2010 de Barbieri fue una costosísima minilaptop marca Sony adquirida en un conocido local neoyorquino en Estados Unidos. El detalle es que la compró a principios de año y todavía no la abrió, no la sacó de su caja. Carmencita está conectada 24 horas a las redes sociales, saca fotos con su Iphone 3, quiere comprarse el 4 ni bien culmine la temporada de verano y su hijo Federico es quien le hace la pata y le enseña los adelantos de la web y los avances tecnos. Santiago Bal es todo lo contrario, no entiende nada ni tampoco se interesa por saber.